Sufre el #Atleti en un desequilibrio vital. Muy pocas veces las virtudes del equipo se manifiestan juntas. Más bien ocurre que los muchos defectos y la mala suerte se alían para anular las buenas sensaciones. Una buena sensación es que dentro del coma en el que sobrevivimos, el enfermo ha manifestado, hoy en Getafe y el sábado ante el Sevilla, una actitud de compromiso y esfuerzo superior al acostumbrado. Hasta Diego Forlán se postula para levantar al equipo como antaño aunque de cara al gol no esté acertado.
Pero solo la intensidad ya hemos visto que no es suficiente y la mala fortuna del tempranero y desgraciado gol del Getafe desviado por Godín lo ha puesto todo más difícil. Aún así había 88 minutos para empatar y sólo lo hemos podido hacer muy al final. Entre Kun y Forlán sólo han metido cuatro goles este año. El Atleti cojea ahora por la delantera donde otras veces lo hacía con la hoy acertada defensa. La misma pareja letal que era la envidia de Europa hoy se muestra sólo a ratos y sin fluidez. ¿Será por esa lucha de egos que salen a la luz en las crónicas periodísticas? Sea verdad o no que algunos jugadores no quieren pasársela a Forlán (y yo no me lo acabo de creer y menos viendo el partido de hoy) lo cierto es que la sintonía no es la misma de antes.
Con nuestros delanteros secos, los goles llegan a través de otras alternativas menos seguras, pero es lo que hay. En los dos últimos partidos dos goles de cabeza de dos jugadores nuevos: el canterano Koke ante el Sevilla y el recién fichado Elías contra el Getafe. Resulta esperanzador que las incorporaciones comiencen a sumar puntos. Lo mismo un día hasta logramos una alineación que pueda repetirse dos días seguidos. Quique lleva setenta partidos sin repetir un once.
Te escuchamos en el twitter de SomosAtleti
Y si quieres sigue el twitter de José A. Vallés
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Participa con tus comentarios y sé respetuoso con los demás. Gracias.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.